Si tu no descubres que la vida esta en ti que Dios es el hombre que se gana su pan que Dios es el cielo que no te dejan ver que Dios es la sangre que han dejado correr. El rió que fluye y que nunca es igual el hombre que entiende y comienza a llorar la piedra y el aire, tus manos y el sol la pala, el arado, el trabajo, el sudor. Búscalo, eso es Dios búscalo en ti... Es Dios, es Dios, es Dios... Es Dios, es Dios, es Dios... El filo que hiere la madera y la luz, que hace de la sombra compañera o temor, la madre que entrega de su pecho el calor, el frío que hace olvidar el dolor. El hambre de ser y la miseria de dar, el miedo a la vida y el valor de vivir, un día y el tiempo, el presente, el ayer, todos los caminos que se pueden andar.