Ya me es imposible distinguir este dolor con hambre, noche y día, debilitado el corazón. La piel pegada al hueso y la semilla de un amor creciendo en esta herida, recordando tu sabor. Tú, mi poesía, aliméntame la inspiración, vuelve a mi vida y vitamíname el corazón, que mi mundo está muriendo poco a poco... sin ti. Quiero que comprendas que sin ti yo no soy yo, con cero pensamientos y un abismo en mi interior. Sin ti no hay luz que encienda lo que en mi se apagó, mi alma se atormenta porque alguien la dejó. Tú, mi poesía, aliméntame la inspiración, vuelve a mi vida y vitamíname el corazón, que mi mundo está muriendo poco a poco... sin ti. ¡Oh, no, no! Tú, mi poesía, aliméntame la inspiración, vuelve a mi vida y vitamíname el corazón, que mi mundo está muriendo poco a poco... sin ti. Si no me hicieras caso, ignorando mi clamor, recojo hoy mis pedazos y me escondo con el sol.