No tengo más fortuna que estos dos brazos que Dios me ha dao, si no han tocao la luna es porque no han probao. Mis brazos hacen todo cinchando por un pan bien ganao, y no le encuentro el modo pa' que estén olvidaos. Y no le encuentro el motivo y Dios es testigo que lucho conmigo al pensar, como lucho sin desgano si mi propio hermano me puede olvidar. Le he preguntao al tiempo donde lleva el amor el de al lao, me contestó sonriendo que se había extraviao. Me pregunté a mi mismo donde se habrá refugiao, lo encontró el egoísmo y lo tiene encerrao. Abrí los ojos hemano no te cegués que vas a sonar por mas montao que vayas el tiempo te ha de ganar. La rodada es pareja y vos no te habrás de salvar, pisoteada es la tierra pero al fin te la da. Y no le encuentro el motivo y Dios es testigo que lucho conmigo al pensar que reventando al de enfrente revienta o reviente vamos a reventar.