Lo que corre en mi sangre Es la esencia bendita De una hermoza mujer Lo que mora en mi alma Es sólo su querer Y aunque tengo en mis manos De empezar nuevamente La posibilidad No me cabe en la mente Ver otra realidad Conforme pase el tiempo Sólo espero el momento De volverme a mirar En los ojos que encerraron mi existir y no dejar un fin. De aquella mujer bonita, De imagen tierna, Llena de luz; Quiero oir el dulce tono De su voz Diciendome que no era enserio aquel adios A aquella, Que hizo conmigo De aquel mendigo Falto de amor Su mas fiel y enamorado soñador A aquella, Que a mi vida le cambio el color Yo busco hoy