Desde siempre, veneró la verdad En cualquiera de sus formas Como aliento de mi vida Desde cuando, me miran a los ojos Como un sabio, a un adivino Un gran maestro que no soy No me niego, no niego declarar Cuando el miedo se hace agujero Justo a un paso de llegar De una manera sutil y con marea alta La frágil ruta espera andando Antes que muera La soledad me acompaña Como el viejo enemigo Que de tanto andar a un lado Se hace amigo Con el miedo pasa igual Que con mareas cambiadas Las tormentas me asustan Y las calmas también.