Ha pasado mucho tiempo, mucho tiempo desde que te deje llorando en la alameda. Ha pasado mucho tiempo, mucho tiempo desde que yo bese tus labios a la fuerza. Mira que he recibido sinsabores y desaires mira que hasta te he visto de otros brazos por tu calle. Debía comprender que nunca serás mía debía de una vez borrarte de mi vida. Pero este terco corazón no te olvida, no te olvida aunque le busque un nuevo amor cada día, cada día. Porque este terco corazón se ha empeñado, se ha empeñado vivir tan solo para ti aunque tú no le hagas caso.