Estás mintiendo y no te achicas, es algo que te funciona bien. Yo a ti te pienso, tú no me extrañas. Hay algo en ti de misterio y es? Que yo te espero y tú te largas. No hay nada que te dé miedo amor, siempre vas un poco más allá. Te ríes y te mueves. Yo no me extiendo ni te retengo; te doy tu tiempo, yo soy cordial. Tú te me escurres, te me diluyes y te disuelves con facilidad. Frente al espejo yo me pregunto: ¿qué demonios es lo que querrá? Y yo sé que todo te da igual, mala. Eres imparable y te abrazo y tú a mí me arañas. Eres insaciable, te beso mala, mala, mala. Sé que me engañas, de todos modos no te dejo por nada. Y te quiero incluso un poco más. Mala. Tú que contabas que has roto corazones a los más guapos del lugar. Y presumías que jugabas con sus almas y luego las quemabas. Yo no comprendo; vienes corriendo, me juras amor, pero luego te vas. Y me dejas queriéndote más, mala. Eres inflamable, me quemas y me pones agua. Incontrolable este deseo mala, mala. Eres indomable; tu boca no hay quién la pare. Comes manzanas envenenadas. No te puedo dejar, y te quiero incluso un poco más. Mala. Que yo te espero y tú te largas. Tu boca no hay quién la pare. Eres inflamable, me quemas y me pones agua. Incontrolable este deseo mala, mala. Eres indomable; tu boca no hay quién la pare. Comes manzanas envenenadas. No te puedo dejar, y te quiero incluso un poco más. Mala. Mala? mala. Llevas tus cicatrices como pinturas de guerra. Tú que decías que jugabas con todos los corazones y luego los quemabas. Mala.