Para no agobiarme y no caer en el olvido... Para sentir que todavía estoy vivo te escribo; mi hombre Quiroga al beat. Dueña de mi mente, mas todavía está presente este pequeño sueño adoslecente, dueña de mi puta fantasía. Nebulosa en mi cerebro y el alma ya no me fía y el Ebro sigue tan negro y la nevera está vacía, mercancía, mi corazón ya casi ni latía, un millón de versos ya forman mi dinastía, sigo en la hipnopia en mi propia filosofía, soy el quebradero certero de la utopía, no, no seré el más fiero puto dueño de la esfera pero puedo ser 'te quiero' en tus labios, vivo a la espera. Cuando es tan dura la vida muero en tu seda, cuando no está el folio o el hombro o algún colega, ya no sé llorar y escribo todo lo que llega a este pobre corazón maldito que navega entre sus mentes, urgentes, sus gentes, llega a la verdad el corazón entre los dientes, benditos inocentes, todavía me duele tanto el alma, que ya no soy capaz de rehabilitar mi karma y cada vez que me acuesto me arrepiento de no acostarme contigo, pero escribo el sentimiento y salgo del pozo del agua contaminada donde evaporan los sueños los que no sueñan con nada, así escapo del ruido de los coches, días sin tus noches, todos tus reproches, así escapo de todos los problemas que me invaden, del fruto del amor el desamor que me ama, ya usted lo sabe. Has de resolver los acertijos para poder dejar algo que enseñar a nuestros hijos, porque amor no es para un rato ya que se queda para siempre como la raja chivato, Ey vato, tu eres mi tato, crecimos juntos, ¿verdad? Recuerdo de ser víctimas del maltrato, de to' aquello de sociedad oprime, veían al rapero como un crimen, hoy escriben y quieren ser tan guay tener compradito el universo, lo único que tengo es esta rabia que se manifiesta en versos, entre mis suaves y tersos, la verdad es que me faltan tus besos, y por la noche hago mis sudokus en mi cama para llenar el vacío de lo que no me da mi almohada, ya, ha pasado tanta hora muerta esperando a que el futuro es quien llamara a mi puerta y ¿tú? Tú eres una rosa y sus espinas, pero ya han vieron de todo estas retinas No alcanzo el climax, vivo en la soledad que acompaña a las puetas en las esquinas; yendo tantas veces a buscarte y me arrepiento en tu portal y no soy capaz de llamarte, la sangre en mis venas me obliga a tirar pa'lante, tengo demasiados problemas para olvidarte.